viernes, 21 de septiembre de 2007

Freddie Mercury. Alguien a quien amar.

La calidez en su manera de cantar logra el punto justo para seducir. Su voz parece perfecta, pero a la vez es tan humana y cálida, que enamora. A muchos, su música nos acompaña desde la adolescencia, otros lo descubren día a día y no pueden resistirse a su magia.Freddie fue un hombre sensible, con un talento único. Un muchacho de sonrisa amplia y dientes importantes, que por sobre todas las cosas del mundo deseaba ser feliz y sentirse amado.



La historia cuenta que nació en Zanzíbar el 5 de septiembre de 1946, bajo el nombre Farrokh Bulsara. Varios años más adelante, en 1966 y ya en Londres, dedicó su tiempo a estudiar diseño gráfico. Le gustaba dibujar y hacer bocetos de famosos, varios de ellos eran los artistas que él idolatraba, como Hendrix o Elizabeth Taylor. Sin embargo, ya estaba claro que su talento iba mucho más allá.Cuando fundó la banda que lo llevaría al éxito, eligió el nombre Queen por su majestuosidad, por el glamour que el término conlleva, y por su ambigüedad. El término “Queen” además de referirse a la realeza, también significa coloquialmente “loca” (en referencia a los homosexuales).“Madre MercurioMira lo que me han hechoNo puedo correrNo me puedo esconder”(Mi Rey de Hadas - My Fairy King – Freddie Mercury)Como su nombre (Farrokh Bulsara) le parecía poco apropiado para una estrella, lo cambió por el que lo inmortalizaría en el olimpo de la música: Freddie Mercury.En una charla, habría comentado que “Madre Mercurio” se refería a su madre, por eso él era Mercury. Mercurio (Mercury en inglés) en la mitología romana era el Mensajero de los Dioses, el que anunciaba las noticias. Además era quien protegía los caminos y guiaba a los viajeros. Tenía alas en los pies, con las cuales se movía con gran velocidad.“Cuando sea viejoEstaré allí a tu lado para recordarte cuánto te amo aún (aún te amo)”(Amor de mi vida - Love of my life – Freddie Mercury)Detrás de los tules que cubrieron al cantante había una persona sensible. Los ajustados trajes de escena que vistieron esa imagen glamorosa, saben de muchas de sus penas y alegrías. Pero es Mary Austin la que mejor conoce a la persona detrás del ídolo.La novia de juventud, la eterna compañera y consejera. El oído que escuchaba al hombre cuando se quebraba, la mujer que estuvo a su lado en los momentos más duros, hasta que Freddie se despidió de este mundo. Mary fue uno de sus grandes sostenes emocionales, seguramente el más importante a lo largo de su vida.


El profundo vínculo entre Freddie y Mary nunca se rompió, a pesar de que ambos tuvieron varias parejas y ella tuvo hijos. El lazo entre ambos iba mucho más allá, había verdadera fidelidad emocional entre ellos dos.Fue un alivio cuando Freddie logró contarle a Mary que, a pesar del afecto que sentía por ella, sus preferencias sexuales tenían una orientación diferente. Lo que Freddie le dijo a Mary no la sorprendió y ella le mostró su total apoyo. Quizás esa fue sólo otra muestra del amor verdadero que existía en esa relación.“Cada mañana me levanto y muero un pocoApenas puedo mantenerme de pie, me miro al espejo y lloro”.(Alguien a quien amar - Somebody to love – Freddie Mercury)Freddie decía ser aburrido debajo del escenario, un hombre normal, distinto al que idolatra el público, y que esa característica tal vez desilusionaba a algunas personas. A veces se sentía vulnerable como un bebé, pero otras veces muy fuerte, especialmente cuando era la figura que brillaba ante la audiencia. Dentro de su casa era tímido, disfrutaba ocupándose de sus gatos y del jardín.Le encantaba hacer compras para la casa, y especialmente hacer regalos a las personas para ver sus caras cuando los recibían. En su gusto personal tenía una especial predilección por los jarrones.Amaba el arte Japonés y tenía una predilección particular por ese país, donde Queen había sido tan bien recibido. En “A day at the races”, Freddie regala una hermosa canción llamada “Teo Torriatte (Let Us Cling Together)”, cantada en inglés y en japonés.


Algunas vez dijo que sus dientes le parecían demasiado grandes, sin embargo su dentadura y su sonrisa se transformaron en marca registrada. “Déjenme darles la bienvenida, damas y caballerosMe gustaría decirles hola¿Están listos para el entretenimiento?¿Están listos para el Show?Los voy a sacudir, los voy hacer rodarLos voy a hacer bailar por los pasillosLes voy a dar jazz y alborotoCon un toque de estiloVamos, dejen que los entretenga”(Déjenme entretenerlos – Let Me Entertain You – Freddie Mercury)Su magnetismo en las presentaciones en vivo, siempre fue el centro de todas las miradas. Adoraba estar frente a multitudes, haciéndolos partícipes del espectáculo al corear sus canciones. Gozaba con los famosos juegos vocales que le ofrecía a sus fans. Quería que la gente se sintiera a gusto en sus shows.Freddie definió a John Deacon como el “ritmo y la simplicidad” del grupo. Roger Taylor “abierto y moderno”. Brian May “es el que disfruta la música que le llega al cuerpo y al alma”. Y él se definió como un impredecible, “el que puede sorprender con algo que salga de la normalidad”.Se enamoró de la energía que Liza Minelli entrega al cantar y bailar. La película Cabaret lo cautivó y fue una gran fuente de inspiración para él.Sí, es una vida difícilDos amantes juntosPara amarse y vivir por siempre en el corazón del otroEs una batalla larga y duraAprender a cuidarse mutuamenteConfiar el uno en el otro, desde el principioCuando estás enamorado(It's a Hard Life / Es Una Vida Difícil / Freddie Mercury)Freddie amaba el vestuario, sentía que el atuendo le daba energía, pero no se imaginaba de viejo con esas ropas, creía que sería ridículo vestirse así lejos de sus años de juventud.


Pudo haber sido un magnífico cantante de ópera, sin embargo eligió el largo camino del Rock ... y mal no le fue. Comandó a una de las bandas más populares del siglo XX.Freddie sentía que Queen había recibido algunas críticas injustificadas de parte de varios medios y periodistas. Estaba orgulloso de todo lo que Queen podía entregar en sus discos. Le encantaba la teatralidad y lo demostraba en sus presentaciones en vivo y en varios de sus clips.Admiraba profundamente a la cantante Monserrat Caballé. Cuando se conocieron, Freddie estaba muy nervioso, pero según cuentan, pasaron una velada maravillosa. Con el tiempo pudieron hacer realidad el sueño de lanzar un trabajo juntos, llamado Barcelona. Monserrat se emociona cada vez que recuerda a Freddie y cada uno de sus encuentros.Era amante de las fiestas, destacándose por la creatividad en este tipo de eventos. Odiaba tremendamente el aburrimiento. Tenía un espíritu inquieto, faceta que demuestra con sus cambios de look, y vestuarios que acompañaron al grupo durante su larga trayectoria.Si bien mantuvo la noticia entre sus íntimos, en 1987 se habría enterado que era HIV positivo.En los últimos años cambió bastantes aspectos de su vida privada. Se hizo más reservado en las presentaciones públicas y se dedicó con toda su fuerza a preparar temas para los trabajos de Queen. “The Miracle” (1989) e “Innuendo” (1991) fueron los últimos trabajos que se publicaron antes de su muerte. Posteriormente se lanzaría “Made in Heaven” (1995), con temas que habían quedado grabados y fueron terminados por el resto de la banda, luego de su fallecimiento. En los años siguientes se editaron trabajos en vivo, grandes éxitos, rarezas y versiones no incluidas en álbumes.“Las cosas malas en la vida fueron tan pocasEsos días se han ido ya, pero una cosa aún es verdadCuando miro y encuentroQue aún te amo(Aún te amo)”(These Are The Days Of Our Lives – Estos son los días de nuestras vidas – Queen)"These Are The Days Of Our Lives" es el último video donde Freddie se muestra frente a las cámaras. En este clip se lo puede ver debajo de importantes capas de maquillaje que no llegan a ocultar su deterioro.Sobre el final del video, Freddie en primer plano deja evidencia de su estado. Con delicadeza baja la cabeza y esbozando una sonrisa que lo dice todo, deja flotando en el aire un melancólico “aún te amo”. Todavía hoy esas imágenes me nublan la vista, igual que el primer día que las vi.En los últimos tiempos de vida, Freddie había aceptado su destino. Interrumpió su tratamiento contra el mal que lo aquejaba. Sólo tomaba los medicamentos que apaciguaban su dolor. El 24 de noviembre de 1991 se marchó de este mundo uno de los más grandes cantantes de todos los tiempos.


El nombre del último amante de Freddie fue Jim Hutton. Sin embargo, Mary Austin nunca se alejó del cantante y fue quien acusó el golpe más duro al morir Freddie. Pasó tiempos difíciles luego de su fallecimiento.Freddie le dejó gran parte de su fortuna a Mary, quien además es administradora de la fundación de lucha contra el flagelo del SIDA que está establecida en nombre de Freddie Mercury, en Suiza.Mary fue quien se encargó de las cenizas de Freddie, por expreso pedido del cantante, ella prometió que nunca diría donde descansan.El 20 de Abril de 1992 en el mítico estadio de Wembley, se reunieron Brian, Roger y John, con varias leyendas de la música. Algunos que crecieron escuchando a Queen (como confesó el propio George Michael) para rendir un merecido tributo en el que estuvieron, entre otros: Robert Plant, Roger Daltrey, Zucchero, George Michael, David Bowie, Annie Lennox, Elton John, y como no podía ser de otra manera, su adorada Liza Minneli.Hay distintas voces que cuentan las últimas horas de Freddie, con algunos relatos conmovedores y otros estremecedores. Sin embargo, quienes lo amamos por su música y su talento, preferimos recordarlo con toda su vitalidad y brillo sobre un escenario